martes, 31 de mayo de 2022

Aquí tienes el truco del almendruco

Inicialmente escrito para: https://www.fluenting.com

Te voy a contar una pequeña historia para esos momentos en los que parece que nunca conseguirás lo que quieres:

—Estos almendros no van a ninguna parte. Cada año están más feos y dan menos almendrucos. Estoy por arrancarlos y poner un buen olmo que, por lo menos, dará buena sombra con el tiempo.

—Un poco radical, ¿no te parece mamá? Estos árboles solo necesitan una buena poda. Hace años que están descuidados. Y tú te empeñas en pedirles peras a los olmos. ¿Me permites, madre, que les pase la motosierra para ver de lo que son capaces?

—Tú verás, hijo mío. Yo creo que es una pérdida de tiempo. Pero si te hace tanta ilusión. El campo también es tuyo. Haz lo que quieras.

—OK.

Sí, señor. Aquellos almendros estaban tristes. Mis padres los habían descuidado. Por eso recogían tan pocos frutos.

Años atrás daban las almendras más dulces, y sus flores nos alegraban cada primavera. Tan hermosos eran que todos dimos por descontado que siempre serían así.

El error fue pensar que lo único que teníamos que hacer era poner el cazo y recoger la cosecha cada año. Por un tiempo realmente fue así. Luego se fueron empobreciendo —digamos que se sintieron solos y un poco abandonados— y en lo que nos pareció un instante, los árboles se habían convertido en unos mamarrachos.

Los árboles hablan...

Habían llegado a un punto tal, que por no dar, casi ni daban sombra. A nadie parecía importarle demasiado lo que aquellos almendros habían sido, y aún menos lo que podían ser.

Su futuro peligraba y yo sentía que me hablaban. Así que decidí escucharlos. Les oí decir que merecían una vida mejor en honor a sus gloriosos servicios pasados.

Una mañana de sábado desayuné y después del café me decidí a podarlos. Tomé la motosierra y me puse manos a la obra. Los contemplé e hice lo que me pidieron. Los dejé desnudos, en su pura esencia —sin artificio alguno, sólo con sus mejores ramas, raíces y su tronco. Me sentí satisfecho y un poco de su tristeza se transfirió a mí. A cambio yo les di un poco de mi esperanza y mi fe en ellos.

Pronto me sacudí la pena. Me acordé de que algún día darían las mejores almendras, en la mayor cantidad, las más duces y serían los más bonitos y luminosos del vecindario. Además, en las entrañas, aquellos árboles lo tenían muy claro: con sus valiosas raíces el reto de crecer y dar buen fruto estaba más que asegurado.

Pasaron los días y meses. Todos nos olvidamos de ellos. Pero volvió la primavera y de las raíces, el sol, el agua y los nutrientes resurgieron los dos hermanos con sendos brotes. ¡Qué alegría sentimos todos! ¡Qué bonitos!

A la sombra de la cochera y junto al seto, los almendros continuaron por sus brotes verdes creciendo.

Yo los veía con orgullo. Esos árboles tenían sus propias razones y su corazón también era sabio. De un tronco de palo, cada uno de ellos empezaba a hacer su maravilloso árbol.

Ignoraban a los que decían "imposible"… ¡y lo consiguieron!

No lo tenían nada fácil. A pesar de la sombra, la escasez de nutrientes, el terreno arcilloso y pétreo y la abundancia de abrojos los dos lo consiguieron. Ambos iban prosperando, como los niños van creciendo.

Quiso la mala suerte —o el descuido— que el muchacho que mi madre contrató esa temporada para desbrozar el terreno, en un giro golpeara y desgarrase de uno de los almendros su precioso y único vástago.

— ¡Qué lástima! —dijeron todos.

—Era el brote más grande —comenté yo.

¡Y qué envidia silenciosa debió sentir con el paso de los días el desgraciado árbol al ver al otro creciendo y creciendo!

Jamás viste un crecimiento tan desigualado…

Al principio casi ni se notó. Pero conforme la primavera avanzaba, más evidente quedaba cuál de los árboles era el almendro mejor parado. El árbol herido se había quedado muy rezagado. Parecía como muerto. Totalmente estancado, como si para él ni la primavera hubiera llegado. Para principios de verano las diferencias eran odiosas. Uno era precioso, grande, asombroso; el otro parecía una estaca abandonada esperando la quema.

Pero lo importante de aquel árbol era que estaba muy bien arraigado en la tierra, no carecía de raíces auténticas y fuertes y la savia de la vida le quemaba por dentro.

No era la primera vez que el almendro había sufrido la inconsciencia de un ser humano. Ya cuando era chico a mi padre se le cayó ese mismo almendro de las manos.

¿Alguna vez has perdido la confianza?…

¡Lo que son los árboles!… Por mucho que otros crean que su tiempo ha pasado, o que nadie recuerde las almendras que regalaron y que todos les digan que son unos desgraciados... ellos tienen sus propios misterios para rebrotar cuando nadie lo espera.

El verano pasó. El almendro sano perdió sus hojas para el otoño. Pasó la navidad, comimos dulces y brindamos por el año nuevo. La vida siempre sigue. No hay quien la pare.

Los ignorantes se empeñaban en que para febrero había que arrancar y quemar el viejo almendro.

—Por encima de mi cadáver —les dije—. A ese almendro todavía le quedan muchos almendrucos, y algún día los veremos.

Y contra todo pronóstico un asombroso brote de esperanza renació de mi buen almendro a la primavera siguiente.

A todos les dije: poned cuidado y no destrocéis estos brotes tan buenos. Que lo que al principio parece poco, en un año es un árbol nuevo.

Todos lo celebramos. Nos enseñó mucho aquel almendro.

Nunca volverás a creer que es mejor el cerezo…

Ahora está precioso. Sus ramas son las más frondosas, su verdor un monumento. De las flores ni te cuento… que los japoneses fardan de cerezos y yo presumo de almendros.

Amigo mío, solo quería compartir contigo el sorprendente crecimiento del árbol herido, que muy pronto dará las mejores almendras.

Todos podemos hacer el truco del almendruco cuando confiamos en nosotros mismos y nos rendimos a la vida que tenemos dentro.

Suscríbete a Fluenting y comparte con tus amigos este pequeña historia de lo que aprendí de mis preciosos árboles.

El anterior post Aquí tienes el truco del almendruco está disponible en: https://www.fluenting.com/



source https://www.fluenting.com/truco-del-almendruco

lunes, 30 de mayo de 2022

¿Por qué sigues haciendo lo que no quieres?

Primero visto en: fluenting

Hombre desmotivado y desbordado¿Amargado porque no avanzas? Te preocupas y te agobias, sí; pero... ¿te ocupas de hacer las cosas de otra forma o sigues empeñado en lo mismo de siempre?

¿Reflexionar es para ti perder el tiempo? Actuar impulsivamente te acaba desquiciando. No creas que para conseguir lo que quieres tienes que estar siempre atareado o hacerlo todo deprisa y corriendo.

Hacer más no es siempre la mejor solución. Cuando estás estresado, añadir tareas o fijarte nuevas metas es echar más leña al fuego. Así te quemarás antes.

Parte del problema está en confundir las prioridades.  Lo principal es que sepas qué es lo realmente importante para ti. Lo que los demás esperan de ti o lo que necesitas para lograr tus objetivos es secundario.

Es fundamental ganar claridad antes de actuar.

¿Tiene sentido para ti lo que haces?

Saber que lo que estás haciendo contribuye a una causa en la que crees y que tiene un impacto positivo en tu vida es el secreto de la felicidad.

Por desgracia, vivir cada día en estado de crisis es lo común. Perdemos calidad de vida cuando estamos en crisis constante. Según Stephen R. Covey esto sucede cuando la mayoría de actividades son urgentes e importantes al mismo tiempo.

Apagar fuegos o hacer las cosas solo cuando son urgentes, te costará caro. Incluso si así consiguieras tus metas, sentirías un vacío al no encontrar mucho sentido en lo que haces.

No confundas lo urgente con lo importante. Para hacer una vida más plena procura que la mayoría de tus actividades sean importantes, pero no urgentes. No dejes que la situación se ponga fea para hacer algo al respecto.

¿Te gusta realmente lo que haces?

Tu satisfacción personal no solo depende de tener metas, sino de tener las metas correctas. Ignorar esto es tirar piedras contra tu propio tejado.

Sé más auténtico. Busca una mayor autonomía. Necesitas sentir que eres bueno en lo que haces, que te gusta y que es importante. Además, es perfectamente compatible con ganar tanto o más que ahora.

Si te conformas con un trabajo que no te ennoblece ni te llena de alegría, estarás renunciando a descubrir las cosas que te gustan y que tienen sentido para ti.

El palo y la zanahoria no bastan para movilizar tus mejores energías y potenciales. Busca dentro de ti hasta encontrar qué disfrutas. Hay formas de hacer lo que te gusta y, al mismo tiempo, pagar tus facturas o aumentar tus ingresos. ¡Encuéntralas! Así es como tendrás una vida más plena.

Quien mucho abarca...

Vivimos en un mundo de gente ocupada. El esfuerzo se confunde con la productividad. Desde pequeños, nuestros padres, profesores y figuras de autoridad nos han enseñado que estar ocupados es 'bueno'.

El esfuerzo inteligente es imprescindible para una vida maravillosa. Los incentivos y las recompensas de otros tienen su gracia. Pero nada de esto debería alejarte de lo realmente importante: sentirte satisfecho por ser quién eres y contribuir al mundo haciendo lo que realmente amas.

Lo comprendo. Yo también estoy muy liado. Tengo mucho que hacer. Hay muchas personas que me importan. Sin embargo, lo que hago tiene un propósito claro que va más allá de ganar dinero o quedar bien con la gente.

También soy yo quien decide a qué dedico mi tiempo, qué actividades son realmente importantes para mí y para mis objetivos, cómo haré mi trabajo, con quién y cuándo.

Tal vez tú sientas que no puedes hacer las cosas a tu manera. Puede que lo veas así, pero no es cierto.

Para salir del pozo, deja de cavar.

¿Quieres cambiar, pero sigues igual que de costumbre? Cualquier comportamiento se refuerza cuando te da de comer o te proporciona un aplauso de tarde en tarde.

Además, como nos enseñan los psicólogos, si lo que haces a veces te funciona y otras no, la situación es aún peor: lo repetirás compulsivamente, lo aprenderás a toda velocidad, incluso si es destructivo.

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¿Estás enganchado a tus problemas?

Las emociones pueden ser adictivas. Al repetir un estado de ansiedad, con el tiempo lo harás parte de tu identidad. Por raro que parezca, amargarte la vida puede ser parte de tu estrategia para sentirte seguro —así no tendrás que cambiar nada— pero es muy destructivo.

Vivir agobiado no es lo ideal. Es cierto que te permite echar balones fuera y responsabilizar a otros cuando no tienes claro qué podrías hacer. Cuando te agobias descargas tus preocupaciones sobre los demás. En un entorno tóxico la vida se vuelve difícil.

Uno se siente importante cuando hay muchas cosas que dependen de él. Tú ya eres importante. No cargues tu propia cruz más de lo necesario.

No permitas que las circunstancias tomen el control de tu vida, o las situaciones agobiantes se repetirán constantemente. El mundo está cargado de ansiedad. Tal vez la hayas sentido desde muy niño. Quizá sin querer estés repitiendo la misma historia con tus propios hijos. ¿No crees que es hora de cambiar las cosas?

Cuando vives amargado es muy fácil amargar a los demás.

¡Puedes cambiar de rumbo!…

Para sentirte más a gusto empieza a ganar claridad. Responde a tus retos. Lo que logres a base de palos y zanahorias no te hará feliz.

Busca unos motivos más auténticos y profundos. El dinero está genial — ¡bendito sea!—, pero persigue un propósito que vaya más allá. Defiende una causa en la que creas y que te llene. Dale sentido a tu vida. Dedica tiempo a las actividades que disfrutas. Busca un trabajo que puedas hacer con alegría, que no aborrezcas cada día o hagas sólo por dinero.

¿Solo aspiras a pagar las facturas o llevar tu BMW? No me extraña que te sientas agobiado y te amargues. Tú puedes hacer algo mejor. Empieza a respetar la totalidad de lo que eres. Escucha con qué resuenas. Descubre qué es lo importante para ti y qué te gustaría hacer realmente.

Cuanto antes encuentres tu propia motivación —aquella que te permite gozar de lo que haces y de la razón por la que lo haces— mejor para ti y para todos.

El futuro pertenece a los que disfrutan con pasión de lo que hacen. A largo plazo, ese deseo profundo de dirigir nuestras vidas siempre gana cuando lo escuchas y respondes al reto. Expande y aumenta tus destrezas para vivir mejor tu vida y llenarla de sentido. Así serás más feliz.

¡Recupera el control de tu vida!...

Tener tus propias reglas es un paso en la dirección correcta.

¿Cómo podrías hacer tu trabajo más a tu manera? Identifica en qué momento del día te apetece más hacer una tarea dada. Hazla cuando más te apetece y comprobarás que además eres más productivo.

Enumera tus obligaciones actuales y renuncia a las que no te llenan y no necesitas. Cuanta más autonomía tengas, más motivado estarás y mejor será tu estado de ánimo.

Conozco a varias personas que no quieren dejar de estar amargadas porque tienen miedo de defraudar a los demás y no poder estar a la altura de sus retos. Mi libro titulado "Llegar a Todo — Cómo Fluir en Todas las Áreas de la Vida" te ayudará a superar estos temores y a encontrar un plan de acción personalizado para avanzar hacia una vida más plena y crecer en todas las áreas importantes para ti.

El anterior artículo ¿Por qué sigues haciendo lo que no quieres? se ha publicado de: https://www.fluenting.com/



source https://www.fluenting.com/no-te-amargues-encuentra-tus-motivos

domingo, 29 de mayo de 2022

Viaja a estos 3 puntos de tu pasado para alcanzar tu futuro ideal

Por cortesía de: https://www.fluenting.com

¿Tienes un sueño que llevas años persiguiendo y el camino se te está haciendo demasiado largo?

Intentas mejorar tu nivel de vida y te sientes estancado y perdido. Te gustaría llegar a casa con mejor humor, atender a tus hijos con más paciencia y charlar largo y tendido con tu mujer. Sin embargo, estás agotado y tienes tantas responsabilidades encima que no te quedan energías al final del día para trabajar por tus otras pasiones.

Probablemente, lo que más te angustia es que cada vez tienes menos energía y no tienes claro qué hacer para ir en línea recta hacia tus metas. Además, a veces te sientes solo porque te falta el apoyo incondicional de las personas a las que más quieres.

Puede que tengas claro cómo es tu futuro ideal, cómo quieres que sea tu familia, cuánto dinero tendrás o cómo será el negocio de tus sueños. Sin embargo, algo te frena constantemente.

Voy a contarte un secreto:

Si llevas años intentando disfrutar de tu vida ideal, probablemente no estás buscando bien…

¿Por qué eres tu peor enemigo?

Te contaré una breve historia que te sonará. Conozco a un hombre que cuando tenía 43 años tuvo que cerrar su negocio porque entró en bancarrota. Debía miles de euros y no tenía otros planes de futuro. Dos paquetes de tabaco al día eran testigos de su ansiedad. Al final el cuerpo le pasó factura y le dio un infarto.

Le pregunté qué mejoraría en su negocio si pudiese volver atrás. ¿Sabes qué contestó? Me explicó que no cambiaría nada porque la culpa la habían tenido el gobierno, la crisis y los bancos. Decía —“Está muy mal la cosa, ya sabes… y están cerrando muchos negocios”

Este hombre estaba buscando el camino a su futuro ideal mientras su negocio funcionaba, pero no buscó donde debía. No se puede decir que no emprendiera proyectos activamente.

Sin embargo, estaba más centrado en buscar culpables. ¿No crees que su vida podría haber sido más feliz si su actitud hubiese sido diferente?

Te cuento esta historia porque a veces nosotros mismos somos la causa de nuestro mal. Hay varias razones por las que puedes llegar a sabotear tus propios sueños, pero aquí están las más comunes:

  • No tener claro quién eres o qué quieres
  • Esperar que algo de fuera se solucione (ejemplos: una crisis, la actitud del gobierno, etc.)
  • Echar la culpa a alguien de tus problemas para no asumir tu responsabilidad
  • Sacrificar tus necesidades para satisfacer las de los tuyos.

Si estás en alguno de estos casos, no te culpo. Lo normal que hasta ahora no hayas dado con la tecla.

Si tienes la sensación de que tu vida podría ser mucho más fácil y plena de lo que es, pero no sabes cómo conseguirlo, aquí te explico cómo llegar a todo y empezar a fluir en todas las áreas de tu vida.

La clave no está solo en tu futuro, sino en tu pasado

Para saber qué futuro quieres para ti y los tuyos hace falta imaginación y pasión. Para saber construir un puente que te lleve hasta allí hace falta un viaje al pasado.

Vamos a hacer una breve excursión a estos 3 puntos de tu pasado. Estos 3 puntos serán claves para comprender qué te frena para conseguir tus sueños.

Parada nº1: Tu infancia

En nuestra infancia, debido a nuestra inmadurez, forjamos muchas de nuestras creencias más destructivas. Son los pilares de las decisiones que tomas ahora. Por eso es tan importante que cuestiones las creencias dañinas más comunes que se crean en esta etapa.

Por ejemplo, alguna vez has pensado… ¡Cómo puede ser que consiga estos resultados tan malos! ¡Si me he esforzado muchísimo!

Lo que importa no es el esfuerzo, sino los resultados. Sin embargo, cuando tenías que estudiar, tus padres no te premiaban por saberte la lección en 30 minutos, sino por estar estudiando durante toooda la tarde.

Seguro que te suena eso de: “¿ya te lo sabes?… Muy pronto sales tú de la habitación… ¡Estudia más… hasta la hora de cenar!” —Estas frases servían para reforzar que lo importante era el esfuerzo y no el resultado.

Durante toda nuestra vida nos han dicho que la clave es esforzarnos al máximo. Pero tú sabes tan bien como yo que en la vida real esto no es cierto. Lo que cuenta es lo que produces, no lo que te esfuerzas. No vale con decirle a tus clientes o a tu jefe: “¡pero si me he esforzado mucho!”

Tampoco se trata de cargarse de responsabilidades pensando en el futuro de la familia, hacer enormes sacrificios por el bien de los nuestros y acabar llevando una vida de esclavo. ¿Acaso no has conocido a gente que consigue lo que quiere y se esfuerza bastante menos que tú?

Otra creencia común que se forja en la infancia es esta:

Tengo que satisfacer siempre las necesidades de los demás antes que las mías. No estaría bien ponerme por delante

Tal vez te sientas obligado a poner las necesidades de los demás por encima de las tuyas. Tú eres el último y todos los demás están por delante de ti, ¿verdad? Pues este es otro de los grandes frenos que te impiden avanzar. Esta creencia provoca una autoestima baja. Probablemente atraerás a gente que continuamente te exigirá más… y se aprovechará de ti porque tú “eres súper bueno.”

Hay muchas otras creencias dañinas que se forman en la infancia. La mayoría de ellas las encontrarás haciéndote la siguiente pregunta: ¿cómo eran mis padres?

Por ejemplo, si tu madre solía sacrificarse “por el bien de todos” y luego se quejaba porque no le agradecíais lo suficiente, tú habrás aprendido a darle toda tu atención a tu mujer, tus hijos, tu jefe, tus clientes, etc… y luego te sentirás frustrado por lo mucho que te esfuerzas y lo poco que consigues…

Parada nº2: Tu adolescencia

Fue en la adolescencia, probablemente, cuando empezaste a tomar más decisiones sin contar con tus padres. Como es lógico, la influencia de tus padres seguía siendo enorme, pero empezaste a identificarte con etiquetas. Por ejemplo: “soy tonto”, “soy el más listo”, “no puedo, no soy capaz”, “puedo hacer lo que me proponga”, “tengo que complacer a mis padres”, etc.

Tu personalidad tiene esa influencia de tu infancia. No es la realidad, es sólo una interpretación que tú hiciste en ese momento y que puedes cambiar cuando te lo propongas.

Parada nº3: Hace 10 minutos

Puede que hasta hace 10 minutos siguieras pensando que la vida es dura y que tienes obligaciones tremendas con tu familia, tu trabajo y el resto de la sociedad. Sin embargo, te recomiendo que veas tu vida por un momento como una película que solo en parte está terminada. Queda mucho que grabar y tú eres el director que debe montarla.

No tienes que filmar la película de siempre. No tienes que demostrar nada. Tú eres valioso. Puedes conseguir lo que te propongas. Y sobre todo: tú eres el creador de la película y puedes contar lo que tú decidas. Puede ser la historia de un hombre poderoso, libre, responsable e inteligente.

Siguiente parada: tu futuro ideal

Todas las decisiones que has tomado hasta ahora te han traído al momento presente. Por eso ahora te sientes desbordado y confuso. Estos 3 puntos del pasado te ayudarán a reflexionar sobre quién eres y qué te impide llevar una vida más plena.

(NOTA: ¿Quieres avanzar de una vez por todas en las cosas que de verdad te importan? Descubre aquí las claves para fluir en todas las áreas de tu vida)

El anterior artículo Viaja a estos 3 puntos de tu pasado para alcanzar tu futuro ideal fue originalmente visto en: Fluenting



source https://www.fluenting.com/viaja-estos-3-puntos-pasado-alcanzar-futuro-ideal

sábado, 28 de mayo de 2022

Cómo diseñar tu vida para que se ajuste a ti

Se ha publicado de: Revista Fluenting

Cuando los días se hacen cada vez más cuesta arriba, ¿qué camino conviene seguir? ¿Poner otra sonrisa forzada por la mañana? ¿Soñar a diario con un cambio de vida? Tirar del carro es duro y no quieres pagarlo con los demás.

¿Y luego qué?... a contentarte con reforzar esa identidad de buen jefe, de gran compañero de trabajo, de padre fenomenal, marido excelente y hombre maravilloso...

¡Genial!, así podrás conciliar el sueño para volver a levantarte a las 6:00 a.m. al día siguiente.

Pero, ¿durante cuánto tiempo?...

Un día pase, pero fingir así un día tras otro amargaría a cualquiera.

Yo quiero ser todo un hombre. Tú quieres ser un gran hombre —y, por supuesto, quieres dejar en el mundo tu huella. Una que al menos tus hijos puedan seguir para que no se pudran en el estercolero.

¡Todo esto está muy bien! Pero para dejar huellas profundas, ¿tú crees que habrá que surcar los caminos?

—Sí, claro; ¿cómo no?

—¡Estupendo! Y, ¿para andar hay que comer?

— ¡Ah sí… comer! Comer está genial. Pero no solo de pan vive el hombre.

Claro hombre, llevas más razón que un santo, pero ¿quién puede vivir sin ganarse el pan?

— ¡Ojalá pudiera trabajar en algo que de verdad me gustase! Ya sabes… no solo por pagar las facturas y huir del miedo. Pero duele renunciar a lo de siempre.

—Oye, cuando no te paras a sentir a qué vas renunciando por el camino, ¿es mejor seguir así; no escucharse, huir hacia adelante y esperar a que algo se rompa?...

Gastamos una fortuna en curar, pero ¡qué poco gastamos en prevenir! (Es normal, somos humanos)

¿Es la tuya una vida sacrificada?

Muchos llevan una vida sufrida. Pero no la cambiarían por todo el oro del mundo. Palos a gusto no hacen daño.

Y a ti, ¿te duelen los palos? ¿Te preguntas alguna vez a qué tanto sufrimiento y sacrificio? ¿A qué causa? ¿Y en beneficio de quién?... No sé tú, pero yo sí.

¿A quién sirve, en última instancia, derramar tanta vida por el camino? ¿Quién bebe y a quién alimenta el cáliz hirviente de tu sangre?

— Por la familia. ¡Mi chico es un chaval fenomenal! Lo hago por mis niños… Para darles lo que necesitan y no verter mi mala leche sobre los demás, en especial mis hijos…

No culpemos a los inocentes de nuestros propios pecados. ¿De quién es la sonrisa fingida? ¿De su padre auténtico o del que has inventado? ¿Es por su bien, o por el tuyo?

¿Acaso eres tú mismo cuando callas tus más auténticas verdades?

Tú también tuviste sueños de niño. Quizá un día los sacrificaste por honrar la máscara que vestían tus padres. Para aliviar sus tristezas y sus inseguridades. Y la vida sigue. El círculo se repite.

Dicen que el mundo está loco, pero no es así. Somos nosotros los que perdemos el rumbo a nuestro poder interior.

Un coche sin sus ruedas permanecerá firme, ¿pero de qué sirve?

¿Para qué están hechos los seres humanos?

—Para lo que haga falta.

No, no es así. Estamos hechos de actos. Tenemos un corazón para dar sangre y vida a nuestras esperanzas, una voluntad para tener fe en nosotros mismos y una cabeza para llegar enteros al destino.

Infancias perdidas que perpetúan nuestra pobreza

Desde pequeños la misma cantinela: haz esto o lo otro por tu bien. Desde niños absorbemos de nuestro entorno su toxicidad o su luz benefactora. No vivimos aislados, pero -como dijo el poeta- sí que vivimos a golpes que apenas nos dejan ser quienes somos. ¿Será por eso que estamos tocando fondo?

Cuando la mentira es el pan nuestro de cada día, cuando han despedido a otro de nuestros amigos y cuando todo parece que está mal, ya solo nos queda ascender.

¿O tal vez no? No hay situación tan mala que no se pueda empeorar un poco. Tenemos poder para destruir y para construir.

¿Qué impulsa a tantos a llevar una vida que está por debajo de sus posibilidades? La respuesta se esconde en nuestras creencias.

A menudo nos sacrificamos por otros, jamás por nosotros mismos

Somos muy plásticos. Sí, tenemos un potencial descomunal y capacidad de adaptación. También contamos con una cabeza dura y una tendencia ancestral a vivir en los polos. Me refiero a dominar o a someternos…

Ser humano también es un deporte

Y para ganar en cualquier deporte profesional se necesita hipertrofiar un talento innato. ¿Cuál es el talento de los hombres? Cualquier súper deportista luce su propia deformidad con orgullo, porque cuenta con la aceptación de su tribu. ¿Qué don tenemos solo los humanos que a todos nos honra?

Si no fuéramos tan “ombliguistas”, veríamos mejor nuestras locuras.  Observaríamos las similitudes con otros deportistas. Otros humanos.

Por ejemplo, no nos chocaría tanto la tribu de las mujeres de labios como platos (aunque a nosotros eso nos parezca feísimo, a aquellas gentes les vuelve locos  – y quien desee conquistarlas debe ser digno de ellas.)

Y de los que hacen el indio, ¿qué decir?... Te digo, por ejemplo, que me marcó una película que vi hace la tira de años. Creo que se llamaba, “Un hombre llamado caballo". No la recuerdo bien. Pero sé que el protagonista sufre una tortura de caballo.

Un hombre llamado caballo

De un poste central penden un par de sogas, con un punzón se atraviesa el pecho para atarse a los cabos. Luego baila entorno al poste. Tensa las cuerdas, agoniza y se agota de sufrimiento. Finalmente, colgado por sendos pechos, deja caer todo el peso de su cuerpo sobre ellos hasta desgarrárselos.  Este hombre blanco, tras pagar el ritual precio, es aceptado como guerrero indio.

Algún rito hemos de pasar para convertirnos en hombres de pleno derecho, en personas aceptadas; en pilares de nuestra tribu.

Todo esto tiene su razón de ser. Somos humanos. Hemos de trabajar por algo. Está muy bien que las sociedades se construyan sobre los talentos de sus individuos. Ahora bien, si para dar a luz no quedara más remedio que sufrir, ¿te quedarías en la oscuridad para no afrontar el reto?

Sacrificios correctos y erróneos para tu vida…

El sacrificio es un acto sagrado y ancestral. Algo bueno a cambio de algo bueno. “Dios, te ofrecemos el corazón vivo y aún latiente de este hombre por una buena cosecha para todos…”

Puestos a sacrificar, ¿qué ofrecerías tú?

Yo ofrecería mis aspectos más bestiales. Preferiría pisar mi sombra brutal para que brillase la calidez de mi propia luz. Y esto no es nada fácil, porque el entorno cambia tanto y, en ocasiones, se vuelve tan oscuro, que pisar nuestra oscuridad para dar un poco de luz propia y ternura humana nos puede poner en un peligro de muerte…

Sí señor, he aquí el dilema: Apreciar tu verdad, tu integridad, la alegría de vivir, la creatividad en tu trabajo y tu bondad, o despreciarlas para sobrevivir en un mundo bestial. Vencer el miedo a tu libertad, arriesgarte a explorar y desarrollar tu potencial para disfrutar y compartir el regalo que solo tú puedes dar a este mundo, o contentarte con el sufrimiento intentando hacer del vicio una virtud.

Si tenemos fe en que la brutalidad es la respuesta, mañana seguiremos comiendo nuestro pan de cada día y jugando con un móvil nuevo, lo produciremos con amargura o se lo quitaremos a otro con alevosía para que puedan comer nuestros hijos. Pero habremos omitido a otros el bien que pudimos hacer ayer. Nuestros hijos, o los hijos de los hijos de nuestros hijos lo pagarán aún más caro algún día —pero claro, eso no lo veremos (¿o tal vez sí?)

"Ojos que no ven, corazón que no siente..."

Si confías en tu potencial, entonces apuestas por la promesa que se encierra en tu corazón. La posibilidad de ser cada día más completo, más tú mismo, más fuerte y débil, más dominante y dominado… con el solo objetivo de descubrir la magia y la música de ser humano.

Ser capaces de imaginar y construir con penas y alegrías, y trabajo, y descanso, un mañana más pleno y armonioso. Donde nos podamos dar a conocer auténticamente, respetar profundamente, cuidarnos un poco mejor que ayer y hacer todo el bien posible a la vida que también nosotros somos.

No sacrificarás tu alma luminosa para ver otro efímero día de oscuridad

Morir, moriremos; pero ¿por qué causa viviremos? Sobrevivir es el mandato de todo bicho viviente, pero tú eres mucho más que eso; eres un hombre.

Cómo seguir adaptándote para ser algún día tú mismo

Para sobrevivir debemos adaptarnos. Aprender nuevos trucos, nuevos comportamientos —que acaban siendo los mismos viejos vicios o virtudes de siempre. Y no perder esa flexibilidad, si no queremos quebrar como un árbol rígido vencido por un alud de problemas.

En oriente siguen una lógica menos lineal y más fluida que la nuestra. Aceptan las aparentes contradicciones. Las cosas son y no son, coexisten y se comprenden. No es que el día se oponga a la noche, vemos que noche y día ocurren simultáneamente cuando tomamos espacio y nos distanciamos. Solo entonces aceptamos la noche como la consecuencia de un mundo que gira contra el Sol.

Somos una cosa y la contraria dependiendo del contexto; porque no somos solo palabras. Estamos hechos de carne y hueso… y alma, y luces y sombras…

También podemos ser auténticos o fingidos

Escrito está en el templo de Delfos: "Conócete a ti mismo". Sea esa la base de tu filosofía. ¿Tienes claro quién eres, qué don tienes y qué quieres? Raro sería. Francamente, a la mayoría eso le importa un bledo.

Recupera los mejores momentos de tu vida…

¿Y de qué te serviría conocerte mejor? De mucho. Podrías, por ejemplo, cambiar de juego, o corregir las reglas que ahora sigues. Incluso podrías inventar uno con más futuro, más emocionante y mejor para ti. Tendrías más momentos extraordinarios, más autonomía y más impacto.

Dime, ¿qué quieres conseguir en tu vida? ¿A qué aspiras? ¿Tiene tu vida algún propósito más allá de la supervivencia, sacrificarte por los demás, destacar en la manada o encajar en los esquemas de otros?

Si sientes que tu vida no te llena tanto como te gustaría, ¿quién sino tú necesita reflexionar?

En mi pueblo  (y por mucho mundo que tengamos, todos somos de este pueblo —mota de polvo en el cosmos— llamado Tierra) solemos decir que "cuando el tonto coge la linde, la linde se acaba y el tonto sigue".

Por Dios, si hasta el bueno de Forrest Gump (o Foresto Gámpido, como a mí me gusta llamarlo) lo decía: “Tonto es el que (solo) hace tonterías.”

Que conste que yo he seguido la linde como el que más. Desde hace tiempo. Soy experto en hacer el tonto. Pero en conciencia, considero que debo parar.

Decimos que vamos a cambiar de vida, pero nunca lo hacemos

La mayoría se conforma con cambiar unas cadenas por otras. Hagamos algo diferente, como probar cosas realmente nuevas cuando algo no funciona…. Cosas como pensar por nosotros mismos, soñar más alto, confiar en nuestra buena estrella y trabajar por lo que realmente amamos y que nos hace sentir llenos de vida.

Para los que quieren dejar de hacer el tonto algún día…

Si quieres dar un primer paso hacia tus nuevas posibilidades, te sugiero que recuerdes las experiencias que te han marcado.

¿Qué creencias construiste que aún configuran tu personalidad?

Identifica cuál es la que más impacto positivo ha tenido.

¿Y la creencia de impacto más negativo?

¿Qué pasaría si cambiaras esa creencia que te ha dado resultados tan pobres?

Lo que en un contexto te hizo fuerte y te permitió sobrevivir, en otro puede suponer una gran derrota.

Por ejemplo, ser un tipo duro está bien para encajar los golpes; pero si no sabes ser tierno y vulnerable, ¿qué opciones les das a tus hijos? ¿Ser aún más duros que tú? ¿Cuál es el límite?

Reflexiona sobre esta pequeña fábula —que quizás ya conoces:

El escorpión pidió a la rana que lo llevara a la otra orilla del río. Aunque la rana tenía miedo del escorpión, éste le aseguró que no le picaría; porque, de hacerlo, los dos morirían. Y, mientras ambos se ahogaban, la rana le preguntó: “¿Por qué me has picado?” El escorpión contestó: "Lo siento, no pude evitarlo. Está en mi naturaleza."

Verás, si fuéramos escorpiones, nada habría que lamentar y tendríamos una excusa: “soy lo que soy y estoy atrapado en ello”. Pero nosotros podemos hacer algo con lo que han hecho de nosotros. Podemos hacer algo liberador, lleno de sentido, que nos dé vida y dé vida a los demás.

Cómo diseñar tu vida para que se ajuste a ti

Si crees que necesitas darle un cambio positivo a tu situación, no es tarde. Y puedes ganar mucho.

En mi nuevo libro, "Llegar a Todo", te invito a descubrir algunas de las claves que a mí, y  a otros más sabios que yo, les han funcionado. El libro te ayudará a integrar mejor los distintos aspectos de tu vida, profundizar en lo que de verdad te importa y perseguir activamente una vida más armoniosa. Puedes echarle un vistazo aquí.

¡Atrévete a romper la inercia!

¿Estás dispuesto a ser un poco más tú mismo? ¿Quieres disfrutar más tu vida? No te lo tomes a mal, pero lo dudo mucho. ¿Por qué habrías de ponerte manos a la obra precisamente ahora? Serías una excepción. Millones necesitan dejar de tirar de sus enormes carros, pero no lo hacen porque se sienten acorralados.

Pesan mucho las cadenas que tantas seguridades nos dan. Y total, ¿para qué romperlas? ¿De qué sirve un poco más de libertad, llevar una vida más plena, estar más presente y disfrutar de lo que uno hace?

Cuanto mayor es el carro —y más atado te tiene— mayor es tu inercia y menos opciones ves

Muy pocos creen que pueden parar, y menos aún se deciden a parar. Solo un puñado —los que realmente marcan la diferencia— tienen el valor de cambiar la senda de lo malo conocido para adentrarse en la de lo bueno por conocer.

Si tú eres la excepción, te felicito. He creado Fluenting para ti. Te anticipo que el viaje merece la pena. Para empezar a hacer maravillas con tu vida con mucho menos sacrificio haz clic aquí.

El anterior artículo Cómo diseñar tu vida para que se ajuste a ti fue primero visto en: https://www.fluenting.com



source https://www.fluenting.com/cambio-de-vida-maravillas-menos-sacrificio

viernes, 27 de mayo de 2022

Técnicas de relajación para empresarios estresados

Originalmente escrito para: FLUENTING impúlsate a una mayor calidad de vida

¿Estás agobiado porque no puedes parar ni un minuto durante el día? ¿Tu negocio no te deja tiempo para estar con la familia? La relajación no es la panacea para todos tus problemas de estrés, pero puede cambiarte la vida si la incorporas en tu día a día.

Las técnicas de relajación, sirven para reducir la tensión al instante y también para desarrollar un estado de armonía y paz interior. Te ayudarán a sobrellevar el día por muy ajetreado que sea. Te harán fuerte ante las adversidades y te sentirás con más energía. Además, con las técnicas adecuadas, podrás prevenir numerosas enfermedades graves que reducirían considerablemente tu calidad de vida.

¿Por qué algunas técnicas de relajación no te funcionan?

Un jarabe para la tos no cura la tuberculosis. De la misma manera, las mejores técnicas de relajación del mundo no curarán el estrés de tu vida si no solucionas el problema de raíz.

Cuando llevas una vida agobiante y de no parar, la solución no es “añadir” un arsenal de métodos como nos quieren hacer ver algunos, sino “quitar” lastre. En resumen: si has probado muchas cosas y no te funcionan es porque debes empezar a trabajar por otro sitio.

Qué es el estrés

La palabra estrés hace referencia a una "gran tensión física o mental". Para sentirte relajado, necesitas practicar lo contrario: una sensación de "desatar, de fluir con la vida y de facilidad"

Experimento con ratas estresadas

En 1936 el endocrinólogo austriaco Hans Seyle hizo un experimento para comprobar la influencia de situaciones amenazantes o molestas en ratas. Las expuso a temperaturas extremas, a distintas sustancias químicas y otras situaciones desagradables (seguro que las ratas adoran a este tío). El resultado fue un aumento de enfermedades psicofisiológicas como úlcera de estómago, deterioro del sitema inmunológico, úlceras en el colon y un aumento patológico de los niveles de adrenalina.

¿Qué es lo que podría “quitar” en mi vida?

En general, se trata de quitar las fricciones innecesarias y los sumideros de energía que hay en tu vida. Te pongo aquí algunos ejemplos…

  • Quitar actividades irrelevantes frente a las que son más importantes
  • Quitar prisas. Levantarse antes si es necesario
  • Acostarse todos los días a la misma hora
  • Eliminar radicalmente el tabaco, el alcohol y sustancias estimulantes
  • Quitar voces, falta de paciencia
  • Quitarse el hábito de comer demasiado deprisa
  • Eliminar, dentro de lo posible, relaciones que nos consuman energía

Para eliminar en tu vida aquello que no es tan importante, tendrás que priorizar. Si todavía eres de los que piensan “todo lo que hago durante el día es igual de importante” es que necesitas pensar más. Truco: un papel y un boli te ayudarán a priorizar mejor.

Para reducir el estrés, la clave no es dejar de hacer las cosas, sino hacer las cosas importantes tranquilamente  - Diana Yárez

¿Cuándo usar las técnicas de relajación?

No utilices las técnicas de relajación como un parche para no reflexionar sobre las causas del estrés en tu vida.

Tú ya sabes que los malos hábitos (en tus actividades y en tus creencias) son los causantes de tu ansiedad. Necesitas realizar un cambio. La relajación solo te ayudará a corto plazo si no solucionas el problema de raíz. Sin embargo, las técnicas de relajación adecuadas pueden ser muy útiles y un buen hábito diario.

No hay un momento ideal para relajarse. ¿No crees que sería mejor estar lo más relajado posible durante todo el día, independientemente de las actividades que realices? Como nos enseña la naturaleza, trata de gastar la mínima energía posible para hacer cada trabajo. Te mostraré cómo puedes sentir una increíble paz interior las 24 horas del día...

Técnicas de relajación ideales para empresarios -para cualquier momento del día

La paz interior está en cada paso de la vida. - Thich Nhat Hnanh, maestro zen vietnamita

Soy una fan de Thich Nhat Hnanh porque enseña técnicas que van más allá de hacer unos cuantos ejercicios que sólo sirven para relajarse un momento, para después ser absorbido por la vorágine del día a día. Te muestra cómo puedes meditar en cualquier momento del día. No hace falta sentarte en un cojín y ponerte en la posición de loto.

Aquí tienes unas técnicas basadas en las que he aprendido de Thich Nhat Hnanh, que podrás aplicar en la oficina, mientras caminas por la calle o atiendes a un cliente. Tu vida cambiará a mejor de inmediato.

1. Tomar conciencia de cada momento

Más que una técnica de relajación, es la base de todo método. Cualquier cosa que hagas a conciencia será relajante. Antes de realizar un ejercicio con el fin de calmarte, toma conciencia de ese momento. A veces estamos obcecados en hacer algo que no nos gusta, nos irrita y nos tensa, pero no somos conscientes hasta que nuestro estado de ánimo se desestabiliza. Somos lo que sentimos y percibimos.

Si estás viendo un programa de televisión que te irrita, toma conciencia de cómo te hace sentir. No tienes por qué tragarte ese estrés. Cambia de canal o apaga la tele. Solo por curiosidad, apaga la tele un minuto durante los anuncios y siente el cambio de energías. Si estás hablando con un cliente que te molesta en ese momento, quizá puedas posponer la reunión. Si no la puedes posponer, sé consciente de lo que percibes y deja que te traspase ese sentimiento, pero no te lo comas.

2. Comer con concentración

Que estés muy ocupado durante el día no significa que tengas que comer con la tele encendida y con mil y una distracciones más. Cuando comas, concéntrate al 100% solo en comer. Procura disfrutar de esa comida con los 5 sentidos, no solo con el del gusto. Mírala, huélela, siente su tacto y saboréala antes de masticarla.

Si estás comiendo con alguien, haz pausas para mirar a los ojos a tus acompañantes y sonríe. No hay prisa. Es momento de comer. Incluso en una conversación, sé consciente de los silencios que hay entre frase y frase. No te olvides de prestar atención a tu respiración, te ayudará a relajarte.

3. Meditación mientras caminas

Este ejercicio puedes hacerlo solo o con gente. Observa todo el estrés, la ira, la frustración o el dolor que pueda quedar dentro de ti. Canaliza esas energías negativas hacia tu pie. A continuación da un paso y estampa el dolor y la ansiedad contra el suelo. Repite el proceso una y otra vez. Cada paso que des te permitirá sentir más y más paz interior.

5. Meditación telefónica

El mal uso del teléfono es una de las cosas que provoca más ansiedad en estos tiempos. Si el teléfono suena, no vayas corriendo y lo dejes todo para cogerlo. Deja un espacio entre el ruido y tú. No te conviertas en una víctima de tu propio teléfono. Te propongo un ejercicio; es difícil pero puedes hacerlo. La próxima vez que suene el teléfono, no lo cojas inmediatamente. Deja que suene e intenta relajarte. Siente cómo el ruido te traspasa, después sonríe y cógelo.

Si eres tú quien tiene que realizar la llamada, respira hondo antes de marcar. Es solo una llamada. Puede que estés pensando: “Estoy más que acostumbrado. No necesito calmarme para llamar”. Este ejercicio no es solo para relajarte, sino para no quedar absorbido por la conversación.

6. Meditación al volante

No siempre cogemos el coche con un objetivo claro. A veces lo usamos para escapar de algo. Buscamos, pero no sabemos qué. Quizá sentimos un vacío y esperamos que la conducción nos ayude a huir de ese sentimiento. Conducir también puede ser una de las técnicas de relajación que más te ayuden. Sólo hace falta poner toda tu atención en esta actividad.

Thich Nhat Hnanh recomienda decir antes de coger el coche el siguiente poema...

Antes de poner el coche en marcha sé dónde voy. El coche y yo somos uno. Si el coche va deprisa, yo voy deprisa.

Medita por un momento su significado. Más de una vez he bajado del coche estresada por ir demasiado deprisa. ¿Y tú?

La mejor técnica de relajación de la historia

Las técnicas de relajación no son sólo unos ejercicios que se hagan sobre un cojín a primera hora de la mañana. Si creas el hábito de vivir plenamente el momento, tu vida será maravillosa, armoniosa y muy feliz.

Como has podido comprobar, la mejor técnica de relajación es la de la presencia.

¿Cómo puedes estar más presente?

Obsérvate a ti mismo, desde la distancia y sin apegarte, como si fueras un testigo imparcial de tu propia existencia. -Diego Dalvera.

Empieza por cerrar los ojos y decirte a ti mismo: "Me pregunto cuál va a ser mi próximo pensamiento". Luego ponte muy alerta y espera a que el próximo pensamiento llegue. Compórtate como un gato observando la guarida de un ratón. -Echart Tolle, maestro zen y autor de El Poder del Ahora

Una historia curiosa

Antiguamente, los maestros zen se acercaban sigilosamente por detrás a sus discípulos con una vara, para comprobar su estado de presencia. Si estaban presentes, serenos y alerta, los discípulos se apartaban o cogían la vara. Si estaban sumidos en sus pensamientos e inconscientes, acababan con los riñones enrojecidos.

Hagas lo que hagas en tu día a día, no olvides dedicar un poquito de atención a la autoobservación. No permitas que las actividades que realices te absorban hasta el punto de no ser consciente de ti mismo.

Si haces estos ejercicios y practicas la presencia, comprobarás que todas las áreas de tu vida se alinean con mucha más facilidad. Al estar aquí y ahora no habrá estrés que pueda contigo.

¿Cómo crees que cambiaría un día cualquiera de tu vida aplicando estas técnicas de relajación? Comparte este post ahora con alguien que necesite más armonía en su vida.

El blog post Técnicas de relajación para empresarios estresados se ha publicado de: www.fluenting.com



source https://www.fluenting.com/tecnicas-de-relajacion-para-empresarios-estresados

jueves, 26 de mayo de 2022

¿Por qué es importante que desarrolles tu marca personal?

Inicialmente visto en: www.fluenting.com

Buscamos, contratamos y hacemos negocios con las personas en las que confiamos. No escogemos a cualquiera, sino al que ofrezca más garantías. No vale mostrarse y presentarse ante el consumidor de cualquier manera. Si alguien no nos cae bien, preferimos buscar otra alternativa.

Tendemos a confiar más en las personas que en las instituciones. Por eso las empresas de mayor éxito han encontrado formas de ponerle corazón a sus negocios. Han sabido dejar una huella memorable -crear una marca de éxito-, y han hecho sus negocios más familiares, agradables y atractivos.

Por qué desarrollar una marca personal es útil para cualquiera; pero esencial para todo empresario / emprendedor

En agosto de 1997, la revista Fast Company, publicó el artículo “The Brand Called You” de Tom Peters, donde sostenía la importancia de las marcas y que cada persona está a cargo de la suya. Señalaba que “Todo el mundo tiene la oportunidad de ser una marca digna de mención.” Así surge el concepto de marca personal.

Tú tienes una marca personal, te guste o no. Las personas también necesitan una reputación sólida; pero no es gratis. Para establecer una identidad y una reputación dignas de confianza que te hagan preferible ante tus jefes, colaboradores, lectores, fans o clientes tendrás que currártelo.

Las redes sociales y las nuevas formas de comunicación desdibujan cada vez más las fronteras entre lo profesional y personal. Nuestras relaciones son cada vez más virtuales y anónimas. Compartimos tantas características comunes que tendemos a vernos como otro más, otro número, otro del montón.

Las personas deben diferenciarse, mostrarse de forma única, irrepetible y distinta para poder destacar. No se trata ya de ser el mejor, sino de ser visto, de ser diferente para ser distinguible de los demás.

Cuando todo lo demás es idéntico, tus valores, creencias, ideas y opiniones marcan la diferencia. -Andrés Pérez Ortega, experto en estrategia y branding personal. (Libros recomendados aquí).

Concepción de tu marca personal: ¿qué huella quieres dejar?

No hace falta ser una estrella de la televisión, la música o el deporte para velar por tu identidad, cuidar tu imagen y distinguirte entre la multitud.

No importa a qué te dediques, tu reputación es vital para lograr lo que quieres y para seguir siendo competitivo. Vives en un mundo donde cada vez hay menos secretos y todo se sabe tarde o temprano.

Lo mejor de tu marca personal es que tú la eliges, lo peor es que vive en la mente de los demás

Tu marca personal es semejante a un jardín: siembres lo que siembres, tarde o temprano lo irás cosechando. Tú escoges la tierra, pones la semilla y el cuidado, el resto no depende de ti.

Para desarrollar tu marca personal necesitas valentía para descubrir y expresar genuinamente quién eres y hacer tuya esa identidad.

No se trata de pomposidad, arrogancia o egocentrismo, sino de tu grandeza como ser humano, del coraje que nace del trabajo duro, de albergar unos principios y tener la voluntad de defenderlos con tus actos. Eso, y la aceptación de quién eres, con todos tus aciertos y desatinos. Ese es el esfuerzo que te lleva a identificar tu propia voz, construir una imagen memorable y conectar con tus clientes.

Procura evitar las actitudes destructivas que no te llevarán a ninguna parte y no cometas algunos errores frecuentes…

Causas comunes del fracaso:

Asumir que ya entiendes tu marca personal. Tu marca no es lo que dices de ti, sino lo que otros comentan de ti cuando tú no estás. Como punto de partida pregunta a diversas personas por las tres primeras palabras que vienen a la mente cuando piensan en ti.

No tomarse el tiempo, ni hacer el esfuerzo de explicarse a los demás. Si no eres claro, la gente probablemente no se molestará en entenderte y tenderán a malinterpretarte. Cuenta tú mismo tu propia historia, no se lo dejes a otros.

No ser auténtico. Crear tu marca personal conlleva mucho más que tener preparada una charla persuasiva para el ascensor (elevator pitch). Se basa en la percepción total que creas: lo que haces, con quién te relacionas y cómo. Tu reputación te precede, te exige el esfuerzo de estar a la altura de la mejor versión de ti mismo.

Definir, desarrollar y comunicar tu marca personal no te será fácil, pero las recompensas pueden ser enormes. Con una marca personal potente, un mensaje adecuado y el medio correcto, puedes conectar casi con cualquiera. Si además estás abierto a escuchar y tomas nota, llegarás mucho antes a tu destino.

Factores del éxito:

Define. Empieza por aclarar lo que no eres y lo que detestas. Tu marca personal es a la vez lo mejor y lo peor de ti. Tú defines quién eres. Párate a pensar, pregunta a tus compañeros de trabajo, amigos y familiares. Conócete a ti mismo: haz inventario de tus talentos, destrezas y fortalezas, toma algún test de personalidad. Identifica cuáles son tus referentes. ¿Quienes son tus modelos? Analízalos para descubrir tus valores.

Desarrolla. No puedes dejar de expresarte ante el mundo que te rodea, y eso a veces puede agobiarte. Lo liberador es que tú eliges, que no serás solo lo que el entorno haya dictaminado, sino lo que has elegido ser. Mientras te esfuerces y sigas creciendo como ser humano, tu marca personal crecerá contigo.

Comunícate. Sé realmente tú. Sé fiel a ti mismo diariamente en tu día a día, en el trabajo y en casa. Comprende cada vez mejor lo que eso significa para ti. Busca la forma de expresarte aún más plenamente. Escucha a los demás y reconoce también su auténticidad. Tu marca personal te seguirá.

Cómo distinguirte y conseguir mayor éxito en las relaciones sociales y profesionales

Crear una marca exige compromiso; el compromiso de la reinvención continua; tocar la fibra sensible de la gente para mover sus emociones; y compromiso con la imaginación. Es fácil ser cínico sobre tales cosas, mucho más difícil tener éxito en ellas. -Richard Branson, magnate de los negocios.

Sigue los 5 pasos que tienes a continuación para convertirte en la opción preferente:

1. Marca tu territorio. No, no se trata de hacer el bestia. Elige un campo de especialización. Decide un área dentro de la cuál destacar. No te quedes con un tópico demasiado genérico. Concéntrate tanto como puedas para llegar a ser un verdadero experto en tu nicho. Puede que tu mercado potencial sea más pequeño, pero será mucho más relevante y provechoso.

2. Empieza a escribir y publicar. Demuestra tus capacidades y tu experiencia. Comparte tu opinión. Intenta convertirte en una fuente fiable de información en tu campo. Reseña un libro de tu especialidad en Amazon. Inicia un blog o escribe como invitado para otras webs solventes dentro de tu nicho.

3. Ofrece alguna conferencia, habla en un taller de trabajo y desarrolla casos de estudio. Demuestra tu experiencia a la vez que conectas con nuevas audiencias y acumulas las historias reales que tanto gustan y tan útiles son para convencer. La mejor forma de arrancar tu marca personal es contando una buena historia.

4. Afina tus perfiles sociales. Examínalos. ¿Cómo describirías a la persona que aparece en ellos? Procura que reflejen los detalles importantes y que estén alineados con lo que quieres contar. Publica con cierta frecuencia. Sé claro y específico, pero intenta encontrar una forma memorable y única de decir las cosas y nombrar tus habilidades. Procura tener el mismo nombre de usuario en todos los perfiles.

5. Contacta con otros profesionales y autoridades del sector. Busca las conexiones que te ayudarán a difundir tu trabajo y te darán a conocer.

Imagina el impacto que tendría en tu vida ser capaz de conectar con los demás de forma memorable. ¿Te has parado a pensar en cómo sería el mundo si dejaras en él la huella de tu propia grandeza? Hay gente digna de confianza, que se hace querer y nos gusta. No podemos evitar comprarles un poco de su felicidad. Decide hoy lo que quieres llegar a ser y empieza a crear tu marca personal.

Si quieres una guía paso paso para convertirte en un experto reconocido, échale un vistazo a 'Expertología: La ciencia de convertirse en un profesional de referencia' de Andrés Pérez Ortega.

¿Qué 3 palabras usarías para describir tu marca personal? Atrévete a compartirlo.

El anterior post ¿Por qué es importante que desarrolles tu marca personal? es cortesía de: Diego Dalvera



source https://www.fluenting.com/por-que-es-importante-que-desarrolles-tu-marca-personal

miércoles, 25 de mayo de 2022

5 pasos para ponerse en forma y volver a tus años mozos

Primero visto en: Diego Dalvera

¿Llevas años sin hacer ejercicio? ¿Has notado que últimamente te agotas al subir escaleras? ¿Tus músculos ya no son tan fuertes como antes? Ponerse en forma requiere sacrificio, pero no es tan difícil como crees si conoces el método adecuado.

Recuperar el cuerpo que tenías en tus años mozos (músculos fuertes, nada de michelines ni de barriga cervecera, etc) no es sólo un factor estético. La grasa corporal que se va acumulando con los años es muy peligrosa. Un exceso de grasa es caldo de cultivo para enfermedades cardiovasculares en el futuro. Para ponerse en forma es importante que sigas metódicamente estos 5 pasos...

Paso 1. Recuperar la energía perdida

Antes de meterse en faena, hay que ir poco a poco. Tan peligrosa es la vida sedentaria, como hacer mucho ejercicio de golpe sin estar preparado. Tu cuerpo tiene memoria muscular, por tanto no te resultará difícil recuperar fuerzas.

Para recuperar la energía perdida empieza dando un paseo diario de 1 hora a más de 6 km/h. No te preocupes si al principio te parece un ritmo demasiado rápido. Poco a poco irás acostumbrándote. Repite este ejercicio y hazlo un hábito de por vida. Al cabo de un mes, te sentirás más ligero que cuando empezaste a caminar.

Paso 2. Sesiones intermitentes

Llevas 30 días andando a paso muy rápido y has cogido ritmo. Es la hora de las sesiones intermitentes. El cuerpo no está diseñado para pasar un montón de horas sentado. En mi caso, paso delante del ordenador más de 8 horas diarias. Es normal que se formen acumulaciones de grasa y perdamos energía.

Sin embargo hay un método de lo más eficaz. Cada hora, levántate de la silla, haz estiramientos de piernas, espalda y cuello. Date un paseo de 5 minutos y vuelve a tu trabajo. No es mucho esfuerzo, pero tu cuerpo agradecerá más una actividad ligera y constante, que una fuerte durante una sola vez al día.

Paso 3. Ejercicio aeróbico

Añade a tu rutina ejercicios aeróbicos como bicicleta, nadar, correr, etc. Se trata de aumentar la intensidad con respecto a los paseos del paso 1. También puedes alternar las dos actividades: 3 días de ejercicio intenso y el resto de días de la semana, paseo rápido.

El aumento del ejercicio aeróbico tiene el beneficio de quemar grasa sin ralentizar la tasa metabólica. De hecho, el ejercicio aeróbico provoca adaptaciones metabólicas que hacen que el cuerpo sea más eficiente a la hora de quemar grasa. (John Parillo, culturista, nutricionista y autor de "High Performance Building")

Paso 4. Crea masa muscular

El músculo funciona como un horno de quemar calorías. Cuanto más fuertes estén, más grasa quemarás. La masa muscular se crea por dos factores; la nutrición y el ejercicio. En primer lugar, elimina las grasas y alimentos procesados. Consume las proteínas adecuadas, ya que se encargan de alimentar el músculo. Termina tu sesión de entrenamiento con 15 minutos de pesas u otro tipo de ejercicios anaeróbicos. Este paso es importante porque una disminución de la masa muscular hará que gastes menos calorías en reposo y las acumules en forma de grasa.

La forma más rápida de perder grasa es con un duro, durísimo entrenamiento con pesas, con 6 a 12 repeticiones por grupo muscular. No confíes solo en el aeróbico exclusivamente. (Chris Aceto, autor de "Everything You Need to Know About Fat Loss")

Paso 5. Sigue la dieta adecuada

La nutrición correcta es imprescindible. De nada sirve hacer ejercicio si comes demasiado, con mucha grasa o si te faltan nutrientes. Para ponerse en forma no existe el ejercicio sin dieta sana, ni la dieta sana sin ejercicio.

Secretos para no fracasar

1. Pésate solo una vez por semana. Al principio es normal que no pierdas peso con tanta facilidad. Aún así te sentirás más en forma cada día.

2. Tómate el pulso después del ejercicio. Llevas mucho tiempo sin ejercitar el cuerpo. Las pulsaciones pueden dispararse por la falta de costumbre. Por eso es importante que vayas poco a poco. Réstale a 220 tu edad y obtendrás las pulsaciones máximas que te debes permitir.

3. Cada paso de estos 5, son acumulables. Cada 30 días añade el siguiente paso a tus hábitos de la siguiente manera…
- Mes 1: paso 1
- Mes 2: pasos 1 y 2
- Mes 3: pasos 1, 2 y 3
- Mes 4: pasos 1, 2, 3 y 4
- Mes 5 y sucesivos: pasos 1, 2, 3, 4 y 5

4. Si lo prefieres, puedes sustituir las pesas por ejercicios de electroestimulación 3 veces por semana. No creas que es fácil. Aunque el aparato de electroestimulación lo haga todo por ti, al día siguiente tendrás las mismas agujetas que si hubieras hecho ejercicio por tu cuenta.

5. Haz un hábito del paso 5. No lo dejes cuando te veas bien. Como he dicho al principio, ponerse en forma no es una cuestión puramente estética. Invierte en salud de forma continuada y podrás volver a tener el cuerpo de tus años mozos.

¿Qué pasaría si te decidieses a probar estos 5 pasos? ¿Qué experiencias crees que vivirías? Si te ha sido útil, comparte este post ahora.

5 pasos para ponerse en forma y volver a tus años mozos es cortesía de: Revista Fluenting



source https://www.fluenting.com/5-pasos-ponerse-forma-volver-sentirse-joven

martes, 24 de mayo de 2022

Crea un plan de marketing que funcione para tu negocio

Primero publicado en: https://www.fluenting.com/

¿Has pensado ya cómo vas a conseguir atraer clientes a tu negocio? ¿Crees que diseñar un plan de marketing es una pérdida de tiempo? Tal vez no te sientes muy cómodo al comercializar tus productos y servicios. Quizá piensas que hacer marketing es una labor desagradable debido a tantos abusos como has visto.

Sin embargo, la comercialización de tus productos no es algo qué puedas ignorar en tu empresa, por muy incómodo que te sientas al respecto.

Existen formas de hacer marketing que son honestas, fieles a nuestros valores y que honran tanto a nuestros clientes actuales como a los potenciales. La única forma verdaderamente sostenible de hacer que tu negocio crezca a largo plazo es mediante el uso de un marketing respetuoso con el cliente y que le entrega valor.

Pero, con lo deprisa que todo cambia, ¿aún sigue siendo necesario pararme a hacer un plan de marketing?

La llegada de internet ha cambiado la forma de hacer clientes, de encontrarlos y de conectar con ellos. Se ha ganado en rapidez de respuesta, es más fácil testar y medir la eficacia de las acciones de marketing.

Para lidiar con el cambio constante y el estrés que causa, los profesionales del mundo online han creado métodos más científicos y prometedores.

Al contrario que hace 15 años, ahora es más fácil entender la rentabilidad (ROI) del marketing. Hoy puedes ver más claramente dónde poner dinero porque funciona, y de dónde quitar recursos porque de nada sirven.

Los antiguos planes de marketing, orientados a plazos tan largos como impredecibles, han quedado anticuados. Planear el marketing sigue siendo importante, pero hace falta un método más iterativo, que permita corregir sobre la marcha y ganar realismo. Un buen plan de marketing debe ser relevante para lograr tus metas empresariales y debe facilitar la toma de decisiones.

El objetivo del marketing es hacer la venta superflua. -Peter Drucker

Por lo tanto, el marketing invierte parte de los recursos disponibles para atraer a los clientes adecuados, facilitar el intercambio de valor, obtener más ventas y aumentar los beneficios. Pararse a realizar un plan de marketing no es un gasto, sino una buena inversión.

Un buen plan de marketing te traerá los clientes adecuados. De la forma más eficaz, logrará que más compradores satisfagan sus deseos, compren en más cantidad y más a menudo las diversas soluciones que produces y les ofreces.

Crea un plan de marketing útil para tu negocio

Para lograrlo te basarás en la investigación del mercado. Necesitarás comprender tu negocio, conocer lo mejor posible a la persona a quien te diriges -qué comprará y qué no-, familiarizarte con su entorno y con la competencia.

Puedes hacer un plan tan sencillo o tan complicado como quieras. En esencia, se trata averiguar cómo hacer tu negocio cada día más atractivo, cómo conseguir clientes más fácilmente y con mayor rentabilidad.

Consideraciones iniciales:

  • El tamaño y la etapa en que se encuentra tu negocio son importantes, por eso no hay un plan de marketing que sirva para todas las situaciones.
  • Las empresas de hoy necesitan ser flexibles tanto en la ejecución como en la formulación del plan. Muchas prefieren planear una hoja de ruta cada 3 a 6 meses, con la intención de alcanzar el siguiente objetivo del negocio lo antes posible. Trazan hipótesis que después caen o se sostienen al completar una serie de tests estratégicos.
  • Diseña un plan coherente con tu visión del negocio. Aunque sea un reto, todo el mundo debe remar en la misma dirección. Ten claro a quién te diriges, contra quién compites, el posicionamiento al que aspiras.. y fija iniciativas y metas acordes con todo ello.
  • No esperes dar en el blanco a la primera. Como un misil autoguiado, aprende de tus propias experiencias. Repite el proceso, afinándolo con la información adquirida, para dar en la diana lo antes posible. Aprende a fallar rápido y en pequeñito (testar) para aprender y ganar a lo grande.
  • Colabora con el resto de departamentos y con todo tu equipo para conseguir la victoria. Elimina las barreras entre los equipos y descubre nuevas oportunidades de crecimiento allá donde estén, no solo a nivel de promoción.

Cómo garantizar que todo el plan de marketing está enfocado en la dirección correcta... y que no estás perdiendo tu valioso tiempo

  1. Analiza la situación actual, las tendencias del mercado y las oportunidades de hacer negocio. Así podrás aprovecharlas a tu favor, formar hipótesis razonables y descartar las suposiciones gratuitas. Puedes usar el popular análisis DAFO (también llamado FODA), cuyo propósito es señalar oportunidades críticas, ofrecer una visión más clara de la situación y de cómo crear ventajas competitivas.
  2. Investiga los segmentos de mercado y la competencia. La regla dorada de los negocios es conocer a tus clientes: su mentalidad y estilo de vida, demografía y comportamiento. Así podrás inspirarte para innovar y crear proposiciones de valor únicas o, simplemente, ajustar tus productos/servicios a sus necesidades y conquistar tu nicho de mercado.
  3. Concreta el propósito específico, el presupuesto y la política de precios. Basándote en tu investigación y experiencias, define las carácterísticas únicas que debe ofrecer tu producto. Afina la visión que tienes de tu negocio para orientarlo más y mejor en la dirección correcta. No vale cualquier cosa. Encuentra una forma de expresar el impacto de tu negocio sobre la vida de la gente a la que afecta, y procura que les llegue al corazón.
  4. Ten en cuenta las acciones del consumidor (buyer's journey), haz un mapa del proceso de adquisición del cliente y optimiza para convertir (vender). Tus esfuerzos podrían ser en vano si no tienes en cuenta los pasos que dará un consumidor potencial hasta convertirse en una venta de tu producto o servicio. Dada la sofisticación del consumidor actual se trata menos de un embudo lineal de marketing y más de un mapa donde los clientes autosuficientes saltan de una senda a otra según lo ven oportuno. El ciclo de vida perfecto incluye atraer contactos, capturar clientes potenciales, nutrirlos, convertirlos en clientes, y conseguir que te recomienden. No hagas un plan lineal, crea un mapa con los posibles canales de distribución y puntos de contacto; empieza allí a reunir y transformar en clientela a una comunidad leal de consumidores y evangelistas de tu negocio.
  5. Distribución: oportunidades online y offline. Identifica tus opciones: desde alianzas estratégicas a posibles adquisiciones. Hay muchas oportunidades disponibles, pero hoy día tener presencia digital es casi obligatorio. Ya que nadie quiere perderse un pastel de miles de millones de usuarios, planea tu presencia online y mejórala constantemente. Asegúrate de que tu web da una buena experiencia al cliente y crea contenidos atractivos.

No es conveniente pensar que hay dos tipos de marketing, uno offline y otro online. El marketing es uno solo y cumple una función imprescindible en tu negocio. Si tus esfuerzos deben ser online, offline o una combinación de ambos, sólo dependerá de tu negocio, de dónde estén tus clientes actuales y potenciales. A partir de ahí, sabrás cómo emplear las herramientas, los canales y los medios a tu disposición, cuántos recursos dedicar, cómo distribuirlos, dónde y para qué.

Sin estrategia de marketing tus productos corren el peligro de ser despreciados.

No basta con tener un buen producto. Lo que no se ve es como si no existiera. Sin un plan de marketing adecuado, dirigido a la persona apropiada, que aporte valor y respete al cliente, y que sea capaz de construir una relación significativa con tus clientes actuales y potenciales, las probabilidades de que tus productos y servicios pasen desapercibidos son colosales.

Un plan de marketing bien pensado traerá clientes, dará visibilidad a tu negocio y sus productos, y permitirá crear una reputación sólida y una marca apreciada con el tiempo.

Pon en práctica las ideas que te acabo de dar. Para no tirar el dinero, céntrate en diseñar estrategias oportunas con hipótesis claras que puedas testar. Así descubrirás qué funciona y qué no.

Tan pronto como identifiques qué campañas de marketing son rentables para tu negocio, al documentar todo y saber cómo lo has logrado, estarás en condiciones de escalar las ideas ganadoras y hacer crecer rápido y bien a tu negocio.

Por favor, coméntame qué problemas tienes con el marketing de tu negocio. Si te ha resultado útil, pásalo.

El artículo Crea un plan de marketing que funcione para tu negocio está disponible en: Diego Dalvera



source https://www.fluenting.com/crea-un-plan-de-marketing-que-funcione-para-tu-negocio

lunes, 23 de mayo de 2022

21 claves de una dieta saludable para gente muy ocupada

Se ha publicado de: https://www.fluenting.com

¿Llegas a casa tarde y preparar algo sano te parece un suplicio? Poco a poco te has conformado con hacerte un bocadillo o comer fuera de casa cualquier cosa rápida. Si tienes una agenda apretada seguramente estás descuidando tu alimentación.

Según un estudio publicado en Public Health Nutrition los alimentos que se suelen ingerir fuera del hogar tienen una baja cantidad de nutrientes pero son muy calóricos.

En este post voy a mostrarte 21 reglas imprescincibles para seguir una dieta saludable, aunque seas una persona muy ocupada.

21. Desayuna de forma sana.

Si desayunas correctamente, tendrás energía para toda la mañana. Un desayuno demasiado rico en azúcares procesados (galletas, colacaos, bollos, etc) hará que te sientas pesado y no rindas en tu trabajo. Procura comer cereales naturales no azucarados: copos de avena, muesli, etc.

Añade a tu desayuno dos piezas de fruta, ya que contienen azúcares naturales de absorción rápida, que aportan la energía que necesitas y estarás de mejor humor. Puedes desayunar además algún lácteo.

Te pondré un ejemplo: yo desayuno un cuenco de avena con leche, un plátano y un zumo de naranja natural. Cuando este desayuno lo sustituyo por galletas o algún bollo, de repente me siento pesada e hinchada.

20. Mete el almuerzo en un tupper

Llévate el almuerzo de casa. Puede valer un montado pequeño de pavo y una pieza de fruta o un yogur. Este consejo es muy valioso porque además de ahorrar tiempo, también lo notará favorablemente tu bolsillo. Si te llevas tu almuerzo al trabajo en un tupper, puedes ahorrarte cientos de calorías comparado con pedir algún bocadillo en un restaurante.

19. Sigue la regla de la mitad del plato

En comidas y cenas, la mitad del plato debe contener verdura. Cómetela antes que todo lo demás. Los vegetales tienen propiedades saciantes, por tanto evitarás comerte el resto del plato con ansiedad.

18. Prepara verdura para varios días

Dedícate a preparar y cortar las verduras de toda la semana y guárdalas en la nevera separadas en raciones. Puedes cocerlas o hacerlas a la plancha. Así, las tendrás listas para ponerlas en el plato. En cada comida y cena, saca tu ración ya preparada y alíñala. Sólo en este paso puedes ahorrar entre 30 minutos y 1 hora por día.

17. Conoce tus “picoteos amigos”

Picotear entre horas puede ser sano. Solo tienes que eliminar unos alimentos y sustituirlos por otros. Olvida los refrescos azucarados, los bollos, las galletas, etc. En lugar de eso, llévate al trabajo unos trozos de jengibre, agua con limón, un puñado de frutos secos (no demasiados) o unas zanahorias.

16. Come cada 3 horas

Sé que estás ocupado y que pensarás que no tienes tiempo para comer tan a menudo. Pero ten en cuenta que si te saltas varias comidas, llegarás con tanta hambre a casa que acabarás inflándote. Además te sentirás pesado y tardarás más en recobrar la energía que necesitas.

Si comes cada tres horas, será difícil que el cuerpo te pida comer entre horas. Ponte una alarma para recordarte cada 3 horas que es el momento ideal de tomar algo sano.

15. Necesitas un plan B

A la hora de llevar una dieta saludable necesitas un plan B. Tú ya sabes que la vida no es algo rígido, y que muchas veces surgen invitaciones, compromisos, etc. Si tienes que ir a un restaurante, puedes tener prevista una comida sana para no caer en tentaciones innecesarias. Por ejemplo, una ensalada y un filete de pollo son una buena elección. (Por si estás pensando en una excusa para sabotearte, en el Burguer King también hay ensaladas).

14. No subestimes la merienda

Desgraciadamente, aún hay personas que asocian la merienda a una cosa de niños. He oído a más de uno decir: "yo ya no meriendo" (entre risas). Merendar es la clave para no atiborrarse en la cena… y ya conoces el dicho: “de grandes cenas están las sepulturas llenas”.

Puedes dejarte preparado un montado de jamón, de pavo, de pollo o de tomate con queso fresco y llevártelo al trabajo. Si quieres un tentempié más discreto puedes sustituir el montado por galletas sin azúcar y altas en fibra. Cuidado con las barritas energéticas; algunas llevan demasiado azúcar, y a veces son caramelos disfrazados de alimento sano.

13. Pésate todas las semanas

Pesarse y medirse es la manera más objetiva de saber si lo estás haciendo bien o no. Es fácil autoengañarse con los hábitos alimenticios. Para llevar una dieta saludable necesitas aceptar los resultados y modificar tus hábitos si las consecuencias no son las deseadas.

12. Sé constante

La mayoría de las dietas saludables no duran porque la gente se aburre enseguida de una disciplina tan estricta. Si tienes tentaciones de comerte algún capricho, puedes caer sin miedo. Una vez a la semana no le hace mal a nadie. Recuerda que una dieta saludable incluye el factor flexibilidad. Un caprichejo por semana no creará un mal hábito, y sin embargo te ayudará a llevar el resto de la semana con más alegría.

11. Sigue la dieta mediterránea

La dieta mediterránea está llena de nutrientes que reducen la inflamación del cerebro y mejoran la salud y la concentración. Puedes llevarte al trabajo una ensalada y aliñarla una vez que vayas a comértela. Te recomiendo que acompañes la ensalada con alguna carne baja en grasas que se pueda comer fría. Así te resultará más fácil comértela cuando tengas un momento libre. Ejemplos de estas carnes son la pechuga de pollo a la plancha, filetes de lomo a la sal, jamón, cecina de ciervo, carpaccio, etc.

10. No te saltes el desayuno.

Si hace falta levántate 30 minutos antes, pero no te saltes el desayuno. Tampoco vale con tomarte solo un café. Para muchos trabajos las horas más productivas son las de la mañana y es importante que no dependas de la cafeína. Toma algo sólido, si puede ser que contenga avena y fruta, mejor.

9. Llama a los especialistas.

Hay empresas que se dedican a llevar comida sana al trabajo. Estas empresas están en auge debido a la vida tan ajetreada que llevamos. No es cuestión de estar comiendo siempre de tupper o de comida fría. Busca el teléfono de alguna empresa cerca de tu localidad que te pueda llevar el almuerzo a la oficina el día que no puedas comer en casa.

8. Tómate un descanso.

Por muy ocupado que estés, tómate un descanso. Si comes y trabajas al mismo tiempo aumentará tu ansiedad y bajarán tus niveles de productividad. Es preferible que te concentres solo en comer durante 15’. Después te sentirás revitalizado y listo para volver al trabajo.

7. Bebe agua.

Es muy normal tener refrescos u otras bebidas azucaradas en la oficina. Elimina estos malos hábitos. Para llevar una dieta saludable necesitarás sustituir el refresco o el café por una botellita de agua. No hace falta que esperes a tener sed para beberte la botella de 2 litros de un golpe. Puedes ir dándole pequeños tragos mientras trabajas. Eso ayudará a depurar el organismo y a que te sientas más ligero. Si te aburres del agua, puedes añadirle cada día algo que le dé sabores distintos, como la hierbabuena, naranja, limón, etc.

6. Fuera el alcohol

No hay excusas. El alcohol deshidrata y engorda. Si reduces o eliminas el alcohol, te sentirás inmediatamente más productivo y enérgico. También a largo plazo ahorrarás tiempo de visitas a la consulta del médico.

5. Date un paseo al día

La razón número 1 por la que la gente no camina es por falta de tiempo. ¿Por falta de tiempo? Todos tenemos 24 horas al día. De ti depende que las emplees en algo importante. Si quieres llevar una dieta saludable e invertir en salud, debes complementar tu alimentación con ejercicio. ¿No tienes 40 minutos al día para darte un buen paseo rápido? Levántate antes y date un paseo. Ni te imaginas la cantidad de enfermedades que te ahorrarás en el futuro. Piensa a largo plazo. Tu día a día puede ser muy ajetreado, pero no querrás cambiarlo por problemas cardiovasculares.

4. Observa tu vida como un todo

Te propongo un ejercicio a realizar 3 veces al día. Expande tu atención. No pienses sólo en lo que estás haciendo en ese momento. No pienses en el trabajo, en la familia, en la comida o en ti. Intenta pensar en tu vida como un conjunto de todas las áreas importantes en las que enfocarse. Una vez que consigas esa visión piensa en cómo se relacionan entre ellas. Entonces te darás cuenta de hasta qué punto llevar una dieta saludable influirá en el resto de áreas de tu vida.

3. Un pasito al día

Llevar una dieta saludable cuando no se tiene el hábito puede resultar agobiante al principio. Puedes dar un pasito cada día, avanzando hacia unos hábitos mejores. Es mejor un poquito más y mejor cada día, que empezar siendo rígido con unos hábitos sanos y no ser constante. Mañana concéntrate en el desayuno. Pasado mañana concéntrate en no saltarte comidas. Al otro ya veremos…

2. Come alimentos no procesados

Los alimentos muy procesados ponen en peligro tu salud y aumentan tu grasa corporal. Te enseñaré un sencillo método para clasificar los alimentos procesados y los que no lo son. Imagínate el abecedario. Una naranja recién salida del árbol pertenece a la categoría A. Si la exprimes para hacerla zumo se convierte en B. Si le echas azúcar se convierte en C. Este método es muy sencillo para ayudarte a elegir alimentos lo menos procesados posibles. ¿Cuántos pasos se han tenido que dar hasta fabricar una pizza?… ¿Y una hamburguesa?

1. Y el más importante. El nutriente clave de la productividad.

Siempre hemos oído hablar de que algunos alimentos favorecían más la productividad que otros. Sin embargo, hasta hace poco los científicos no han sabido exactamente hasta qué punto influían. Supongo que habrás oído hablar de que tienes que comerte 5 piezas de fruta al día y comer mucha verdura para ser muy productivo. Independientemente de que la fruta y la verdura sean necesarias para una dieta saludable, se ha demostrado que hay otros factores que influyen más en la productividad.

Una nutrición adecuada puede elevar los niveles de productividad en un 20% en promedio -OMS

El doctor Leigh Gibson, psicólogo experto en conducta alimenticia de la Universidad de Roehampton, realizó un estudio para comprobar la influencia de ciertos nutrientes en el organismo. Es un experto en neuroquímica del apetito, ansiedad y estrés. El Dr. Gibson afirma que el cerebro funciona mejor con 25 gramos de glucosa en el torrente sanguíneo… (más o menos la cantidad que se encuentra en un plátano)

La cuestión está en que para ser más productivo es más importante de lo que se pensaba mantener estables los niveles de glucosa.

En lugar de tomar un dulce procesado y darle un subidón de azúcar al organismo, es preferible tomar avena, plátanos, etc, para que la glucosa se libere gradualmente. Así se optimiza la capacidad intelectual y la concentración mental tan necesarias para la gente atareada.

Como sabes, todas las facetas de la vida están relacionadas. Si cuidas tu salud, tu vida, tu negocio y tu familia irán a más. Llevar una dieta saludable puede ser difícil en un día a día estresante. Sin embargo, con estos 21 trucos notarás una diferencia enorme. ¿Cuál de estos trucos crees que te costará más aplicar a tu vida? Comenta cualquier idea que tengas sobre este tema…

21 claves de una dieta saludable para gente muy ocupada se ha publicado de: Fluenting



source https://www.fluenting.com/21-claves-de-una-dieta-saludable-para-gente-muy-ocupada

domingo, 22 de mayo de 2022

10 cosas que nunca has querido saber sobre nutrición

Por cortesía de: Fluenting

La nutrición es un tema del que todo el mundo cree saber, especialmente las madres. Es como si al parir les introdujeran los conocimientos directamente en el cerebro al estilo Matrix… En lugar de “ya sé kung fu” ellas piensan “ya sé nutrición”. Sin embargo, mucha gente está muy equivocada acerca de qué es una correcta alimentación y qué no lo es. En este post voy a desmentir 10 mitos sobre nutrición que seguramente romperán tus esquemas (y los de tu madre…)

Mito 1: Las comidas de cuchara son más sanas

Probablemente es uno de los mitos más extendidos. Te haré dos preguntas rápidas… 1) ¿Qué es más sano: un filete a la plancha con judías verdes, o un plato de alubias con chorizo? 2) ¿Qué es más sano: un plato de lentejas viudas o un plato de cochinillo frito? La respuesta a la primera pregunta es: el filete. La respuesta a la segunda pregunta es: las lentejas. Como ves, la cuchara no es la solución a todos los problemas nutricionales.

Si estás pensando en hacerle una salsa al cochinillo frito para podértelo comer con cuchara y así convertirlo en “plato sano”, piénsatelo dos veces. Si eres de los que dicen: “yo como muy bien porque como mucho de cuchara”, tengo que decirte que replantees tus creencias. Si te escudas en tu cuchara para comer lo que te apetezca, tal vez en unos años te haga una visita el señor colesterol, el sobrepeso o la hipertensión.

Mito 2: Hay que comer cuando se tenga hambre

La mayoría de la gente no distingue entre comer por hambre y comer por gula. La sensación de hambre se produce cuando el estómago está vacío. A veces no distinguimos bien el hambre real del deseo de comer. Otras veces la sed se confunde con el hambre. Además, el cuerpo se acostumbra a los hábitos que le impongas. Si quieres tener un metabolismo activo y sano deberías comer cada 3 o 4 horas. Pero si solo “sientes” hambre dos veces al día, ¿le darás de comer a tu cuerpo sólo dos veces al día?

Un ejemplo extremo: a un bebé se le da de comer cada 3 horas, independientemente de si protesta o no. No le dices: “hijo mío, hasta que no llores de hambre, no probarás bocado”. No. Simplemente le toca comer y punto. ¿Entonces por qué cuando se trata de ti, tienes que esperar a que tu estómago ruja cual león?

Estoy de acuerdo en que no es bueno hincharse y tampoco comer por comer. Ahora bien, una vez que has adquirido malos hábitos de alimentación, has “hackeado” tu cuerpo y te cuesta más distinguir el hambre real del simple deseo. La solución: come cada 3 o 4 horas en cantidades pequeñas y en poco tiempo tendrás hambre cuando debas tenerla.

Mito 3: Estoy gordo, pero es mi constitución

No lo voy a negar. El factor genético influye. De hecho, del 30% al 40% de la población obesa mundial se debe a causas genéticas. Eso no quiere decir que tengas la excusa perfecta. “Da igual lo que coma… si lo mío es genético…” Y así se pasan los días zampando hamburguesas y patatas fritas.

Una correcta nutrición soluciona problemas de obesidad

El 80% de las personas con obesidad o sobrepeso pueden corregir el problema a base de unos hábitos correctos de alimentación. Los casos más comunes son los siguientes: o bien tu familia ha comido siempre como una lima y te has acostumbrado a nutrirte mal, o bien fue hace unos años cuando te empezaste a descuidar. En cualquier caso, el factor genético no es una excusa. De hecho, si eres propenso genéticamente a engordar, puedes estar delgado. Sólo necesitas cuidarte un 40% más que una persona normal y llevar una nutrición correcta. Sin excusas.

Mito 4: Para comer bien hay que comer de todo y quedarse con un “pelín” de hambre

No se trata de quedarse con hambre, ni siquiera cuando quieres adelgazar. Una correcta nutrición pasa por darle al cuerpo lo que necesita. El problema es que muchos creen saber lo que necesita sin haber estudiado nada sobre el tema. Por cierto, me surge una duda: cuando algunos dicen lo de quedarse con un “pelín” de hambre, ¿cómo miden exactamente el “pelín”?

Lo de comer de todo es cierto, pero cuidado. Aquí me tengo que referir de nuevo a las madres cuando utilizan la expresión: “comer de todo”, cuando en realidad quieren decir “come de lo que yo te pongo porque lo digo yo”

Conocer la proporción correcta es clave para una nutrición sana

Una sana proporción de macronutrientes (hidratos de carbono, proteínas y grasas) es necesaria. Los expertos en nutrición establecen como una proporción estándar 55% de carbohidratos, 30% de proteínas y 15% de grasas. Sin embargo tendrás que ajustar esas proporciones según tu situación particular. La cuestión es que cuando decimos “yo como de todo” no estamos calculando con exactitud dicha proporción.

Mito 5: La comida española es la más sana

Aquí es cuando muchos echan mano de la “dieta mediterránea” para justificar los excesos. Recuerdo un día que pedí una pizza del Telepizza y al recogerla, vi que en la caja ponía: “¡Esto es dieta mediterránea!”

No todas las comidas españolas pertenecen a la dieta mediterránea

Voy a aclarar una cosa: que un ingrediente se encuentre en territorio español o cerca del Mediterráneo, no lo hace sano de por sí. Una pizza del Telepizza no es dieta mediterránea, aunque lleve pimiento y tomate de la tierra. Unas alitas de pollo fritas no son dieta mediterránea, aunque el pollo sea de una granja valenciana.

La forma de cocinar los alimentos es tan importante como el alimento en sí. No es lo mismo cocer que freír y no es lo mismo echar chorizo que no echarlo.

Ancel Keys, el gran impulsor de la dieta mediterránea en los años 50, utilizó este término para referirse a los hábitos alimentarios observados en el área mediterránea. Estos hábitos incluían un 55% de hidratos de carbono, un 15% de proteínas, un 10% de ácidos grasos saturados, un 15% de ácidos grasos monoinsaturados y 5% de ácidos grasos poliinsaturados aproximadamente.

La cuestión es que los hábitos en España no son, ni mucho menos, los que había en los años 50. Los alimentos de antes no eran tan procesados (salchichas, hamburguesas… ni tampoco pizzas). No se solían freír las cosas y tampoco se le echaba por costumbre de todo a las legumbres, que solían ser viudas o con alguna verdura. Recuerda esto cuando oigas a alguien decir que la comida española es la más sana. Depende de qué alimento y de cómo lo cocines.

Mito 6: Comer bien es fácil

Como he dicho al principio, todo el mundo “sabe” de nutrición, sobre todo las madres. Comer bien no es ni fácil ni intuitivo. Una sana nutrición requiere de conocimientos específicos. Es fácil engañarse con las cantidades, las proporciones o acabar comiendo lo que es más barato.

Por ejemplo, no todo el mundo tiene la misma complexión ni gasta las mismas energías. Entonces, ¿por qué todos los platos que se ponen en la mesa son igual de grandes? Otro ejemplo es una de las frases más utilizadas por las madres: “¡si porque te tomes un poquito de esto no pasa nada…!” Tal vez les regalen un libro de nutrición en el hospital al parir. Y así un día tras otro comiendo un poco de esas croquetas tan deliciosas y un poco de ese plataco de fabada asturiana, acabas mal nutrido y/o con sobrepeso.

Mito 7: Lo light es sano

Un donut “light” engorda muchísimo, por muy light que sea. Lo que presume de no tener azúcares añadidos, lleva añadido otra cosa peor. Las etiquetas suelen engañar. Por ejemplo: libre de grasa no significa libre de azúcar ni libre de calorías. Otro ejemplo: una Coca Cola light no lleva azúcar añadido, pero sin duda lleva otro tipo de edulcorantes artificiales que son peores aún para la salud.

Light no es sinónimo de sano

Mito 8: Existen alimentos neutrales que ni engordan ni adelgazan

Ningún alimento es neutral. Todo ayuda o perjudica según el momento, con qué más te lo tomas, los ingredientes y la cantidad. Por ejemplo, comer mucha verdura, por sana que sea, podría llegar a engordar si te pasas. El principio número 1 de la ley del equilibrio calórico establece que demasiado de cualquier cosa engorda, incluso la comida sana.

Mito 9: No se pueden tomar hidratos de carbono y proteínas juntos

Hubo algunos nutricionistas en los años 80 que opinaron que la proteína necesitaba un medio ácido para ser digerido y los carbohidratos un medio alcalino. Decían que el sistema digestivo no puede encargarse de las dos cosas a la vez. Estas personas subestimaron el poder del organismo. Los jugos gástricos, en condiciones normales, pueden con todo sin problemas.

Mito 10: La comida basura siempre se almacena en forma de grasa

La ley número 2 del equilibrio calórico establece que pequeñas cantidades de cualquier cosa, incluso la comida basura, no se almacenarán en forma de grasa siempre y cuando quemes más calorías de las que ingieres… (haciendo ejercicio, se entiende)

Para estar sano, haz ejercicio a diario

Alimentarte bien, además de prevenir enfermedades, te hará sentir más ágil, sano y lleno de energía. Estos son los 10 mitos más extendidos que, por el contrario, facilitan una mala e incorrecta nutrición. Seguro que hay más mitos acerca de la nutrición… ya sabes, creencias de esas que todo el mundo da por ciertas pero que no lo son. ¿Conoces alguno más? Por favor, coméntanoslo.

10 cosas que nunca has querido saber sobre nutrición fue originalmente escrito para: Diego Dalvera



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